Mi querida Antonia. Parte I

Es difícil empezar esta entrada, porque seguro que me dejo muchas cosas que quisiera contar.
Ayer mismo alguien me hizo recordar a una de las personas mas importantes que han pasado por mi vida. Mi “awe” Antonia, prácticamente mi segunda madre si me permitís la expresión. Se fue, hace algo más de un año, pero en cierto modo sigue aquí conmigo.

Su historia es la historia de una mujer trabajadora, madre de 10 hijos y, que por cosas de la vida, finalmente fueron 9. (Que no es moco de pavo)

Vivió en esa generación que se vio obligada a emigrar al “norte” (Cataluña y esas zonas) porque en Andalucía solo había hambre para todos. Y esos todos ya eran muchos.

Durante varios años, estuvo al frente de una modesta mercería mientras todos mis tíos se espabilaban cada uno en trabajar en lo que se podía. Aún hoy hay gente que me para por la calle y me recuerda que soy la nieta de “la mercera”.

Una mujer muy buena, con su mucho genio y también con un humor excelente, nos reíamos muchísimo con ella. Cambió bastante al morir mi abuelo. Curro se llamaba, me gusta mucho el nombre porque hoy en día no se ven muchos Curros por ahí…

Cuando enviudó se deprimió muchísimo, ya no parecía la misma, siempre empeñada en ir de luto. Para ella no había más color que el negro. Nos costó muchos años convencerla que el azul marino no era alegre, y que podía usar también algún gris y no por ello iba a ser una “fresca”. Es lo que tienen las abuelas, que todo lo que puedan decir los demás, lo tienen mucho en cuenta.

A veces me sorprendía la memoria selectiva que podía llegar a tener, alo mejor no recordaba dónde había dejado las llaves o el monedero, pero siempre que recordaba cosas pasadas podía decirte el nombre de la persona que hablaba y , además el árbol genealógico de esta persona y vida y obra de toda su estirpe. Era única contando historias.

Nunca vi a nadie dispersarse tanto para contar algo…
Alo mejor quería decirte que la hija de Pepita se había casado con un chico que era del mismo pueblo que ella. Para eso te formaba un pitote…”La hija de la Pepita, la cuñá de la señora Engracia que vivían allí en el pantano cuando tu abuelo se vino a trabajar desde Cádiz porque la construcción estaba muy mala, y tenía un niño que estaba malito de la cabeza que fue la que se casó con el hijo de Aurelio el pescadero de la familia de Rita “ la ratona”….pues que se casa su niña!!!”

Y se quedaba tan ancha…


Por aquel entonces me sacaba de quicio con sus explicaciones porque siempre acababa perdiendo el hilo de sus conversaciones y no sabia quien era quien ni las hazañas de cada uno de ellos. Aun asi…sus historias son inolvidables…y como no quiero que la cosa se haga demasiado pesada para vosotros, mis lectores acabo esta entrada prometiendo una segunda parte y quizá una tercera, una cuarta…

Una frase de mi “awe” para terminar….” Toma 5 duros y cómprate un “shiclé” y deja de darme castigo”…Que grande eres Antonia!!!!!

Hasta la próxima.

3 comentarios:

Obocaman dijo...

jajajajja las historias que se van por las ramas me ponen de los nervios, porque cuando acaban de contarte algo ya no sabes de que trataba la conversación. Mi ex se cabreaba porque no pillaba nada cuando ella hablaba con su madre y conmigo.
Para contarte algo de su vecino, te contaban la historia del primo que tenia un kiosco y que una vez se cayo justo delante de la tia Rufina, la que estaba casada con el Paco de la joyeria, el cuñado del sastre que una vez le hizo el traje de boda a Paqui, la cuñada de su vecino, que por cierto esta refriado.


Las abuelas son grandes contando batallitas, la mayoría mas de 80 años de historia con patas.

AmoaGuilleMostaza dijo...

Jopé.que grande tu abuela.Las historias de las abuelas no deberían perderse nunca.Algún día contaré las de mi abu,que a la Claudia si que la conoces tú.Menudo personaje,como la Antonia.jijiji
Me alegra ver que has vuelto.
Por cierto dos cosillas.
1)El que ha dejado el comentario en mi blog es Guille Mostaza,sí.Se me sale el ego por la boca.
y 2)Si te da por amar a Guille,no olvides que yo lo vi primero.Eso puede costarte la mitad de tu cabellera.
jajajajajajaja
Besotes gordotes Wapa!!!

Mi viaje de Chihiro dijo...

Obocaman, pero en el fondo tienen su encanto..sino seria como hablar con cualquier otre persona..eso les hace especiales..aunke saca de quicio , lo sé. Creo que me han caido goterones de sudor tan gordos como melones..pero en el fondo es lo que hay..son asi y asi los queremos.

Fer, la Claudi es mucha Claudi, suerte tienes de tener ese pedazo de abuela que no se achanta con nada ni con nadie...anda que no me he reido yo veces con ella y sus historias...y las collejas que han volado en mi presencia. ES el terror del barrio y que lo siga siendo por mucho tiempo. A ver si le rindes homenaje no? Estaria bien...Respecto a tu comentario

1) Me alegra un montón que GUille sepa de tu existencia.

2) Como buena amiga jamás me interpondría entre tu y Guille, después de todo...tu le viste primero.

Besotes gordos a los dos!!!!!!!!